Prepárate para enfrentarte al Demonio del Odio, uno de los jefes más difíciles en Sekiro: Shadows Die Twice. Este poderoso enemigo te desafiará en cada paso del juego, pero con las estrategias adecuadas podrás superarlo. Aquí te presentamos algunas tácticas que te ayudarán a enfrentar al Demonio del Odio y salir victorioso.
Preparación: El Demonio del Odio utiliza su brazo izquierdo en llamas para lanzar bolas de fuego y aplastarte durante la pelea. Para sobrevivir, es recomendable tener objetos que reduzcan el efecto del fuego, de esta manera podrás mantenerte con vida y evitar perder una vida por las llamas. Además, es importante mejorar el Silbato del Dedo a su máxima calidad, conocida como "Malcontento". Con él, tendrás la oportunidad de aturdir al Demonio hasta tres veces durante la pelea. Sin embargo, es aconsejable guardar estos aturdimientos para la fase final de la batalla, cuando el Demonio se vuelve más peligroso.
Fase Uno: Durante la primera parte de la pelea, debes correr rápidamente hacia el Demonio del Odio y mantenerte lo más cerca posible de él en todas las fases. Si te alejas demasiado, solo te lanzará proyectiles de fuego que no podrás bloquear y sufrirás daños masivos. Una vez cerca, debes estar atento a dos ataques constantes: un pisotón y un cabezazo. Puedes bloquear ambos ataques, pero también puedes esquivar el cabezazo si lo prefieres. Ten en cuenta que no tendrás tanta suerte para esquivar el pisotón, así que bloquear es la mejor opción durante toda la pelea. Si ves que el Demonio salta y cae con fuerza, retrocede un poco, espera a que caiga y luego podrás agarrarte a él para evitar que lance bolas de fuego y aturdirlo parcialmente durante un corto período de tiempo, lo que te permitirá realizar más ataques. Además, el Demonio va a utilizar un ataque de carga imbloqueable. La única forma de evitar este ataque es saltando hacia la izquierda. No puedes saltar hacia la derecha, ya que su brazo de fuego te golpeará. Una vez que termine su carga, acércate rápidamente y mantente lo más cerca posible, realizando ataques constantes.
Fase Dos: Afortunadamente, el Demonio del Odio mantiene muchos de los mismos movimientos durante esta fase. Sin embargo, en esta parte aprenderá dos nuevos ataques. Uno de ellos consiste en levantar su brazo izquierdo en el aire y golpear el suelo, dejando un rastro de fuego derretido. Debes correr hacia la izquierda o hacia la derecha para esquivar este ataque, saltando justo antes de que golpee el suelo. La única forma de bloquear este ataque es con el paraguas. Sin embargo, debes asegurarte de tener la mejora que le permite bloquear el daño de fuego. El segundo ataque no es tan preocupante. El Demonio disparará orbes de fuego que te perseguirán, lo que dificultará esquivarlos mientras te acercas. Es mejor mantenerse lo más cerca posible, ya que estos orbes pueden derribarte con fuerza y darle al Demonio la oportunidad de utilizar sus habilidades más peligrosas. Nuevamente, intenta mantenerte lo más cerca posible, repitiendo gran parte de lo que hiciste en la primera parte de la pelea, y deberías poder darle el golpe final poco después.
Fase Final: La fase final de la pelea es la más difícil. Al comienzo de la batalla, debes alejarte rápidamente, ya que el Demonio del Odio lanzará un lazo de fuego alrededor de sí mismo. Este lazo primero lo rodeará a una corta distancia y luego se hará cada vez más grande antes de rodearlo por completo. Si no te alejas lo suficientemente rápido, tendrás problemas. Sin embargo, si lo logras, debes prestar mucha atención a las llamas, ya que el Demonio se prepara para cargar contra ti. Después de esto, todo vuelve a la normalidad. Mantente lo más cerca posible, golpea al Demonio regularmente, esquiva sus ataques, salta a la izquierda cuando cargue y no le des un respiro. Durante la pelea final, tendrás la oportunidad de utilizar el silbato Malcontento para aturdirlo. Solo puedes usar este brazo prostético tres veces, así que asegúrate de que cada uso cuente.
Con estas estrategias, estarás mejor preparado para enfrentar al Demonio del Odio en Sekiro: Shadows Die Twice. Recuerda ser constante, paciente y aprovechar al máximo tus habilidades. ¡Buena suerte en tu lucha contra este formidable enemigo!